Generic selectors
Exact matches only
Search in title
Search in content
Post Type Selectors
Filter by Categories
Blog
Eventos

¿Sabías que casi la mitad de los niños ha vivido al menos una experiencia adversa en su infancia?

Las experiencias adversas en la infancia (ACEs, por sus siglas en inglés) son eventos traumáticos como el abuso físico, emocional o sexual, la negligencia, la violencia familiar, el consumo de sustancias, enfermedades mentales en el hogar, separación de los padres o la muerte de un familiar cercano.

El estrés crónico que generan puede alterar el sistema hormonal, afectar el apetito y aumentar el deseo por alimentos ultraprocesados. También se relacionan con depresión, mal sueño y dificultad para controlar impulsos.

Aunque las ACEs se han relacionado con enfermedades graves en la adultez, como cáncer y problemas cardiovasculares, su vínculo con la obesidad ha empezado a aparecer como un factor predisponente, tanto en niños como en adultos.

Además, otros factores estresantes en el entorno familiar o social, pueden dificultar que las familias mantengan hábitos saludables. Entender este vínculo es clave para diseñar intervenciones más empáticas, efectivas y libres de juicio.

La obesidad infantil no es solo cuestión de hábitos. También es cuestión de historia, entorno y cuidado.

Referencias: McCrory E, et al. Childhood trauma, the brain and the social world. UK Trauma Council, 2020; Schroeder K, el al. The association between adverse childhood experiences and childhood obesity: A systematic review. Obes Rev. 2021 Jul;22(7):e13204; Schiff M, et al. Adverse childhood experiences and obesity over time. Public Health Nutr. 2021 Aug;24(11):3205-3209; Schulte EM, et al. Adverse Childhood Experiences and Weight Stigma: Co-Occurrence and Associations with Psychological Well-Being. Stigma Health. 2021 Nov;6(4):408-418.

Velo y compártelo por Instagram aquí.

Loading...